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(muchas imagenes de las que utilizo las saco de Google, si no puedo usar alguna avísame y la quitaré enseguida)

jueves, 18 de agosto de 2011

ESTOY FATAL!! PARTE IV - FIN



Y finalmente… aquí tenemos la última entrega de mi fin de semana rarito, que no quiero aburriros contándoos historias más de la cuenta…



El domingo fue normal, con Nacho con resaca el pobre, menos mal que yo no bebí porque debía ser garrafón del bueno, hablando con el resto estaban todos fatal…
La mañana fue una típica mañana de domingo: desayuno, tele, comida, peli, siestilla… lo ideal para un domingo, vamos.



Llega la hora de irse al partido (un Madrid-Barça no me lo pierdo ni muerta) y fuimos a casa de Alvarito con mas amigos de Nacho a disfrutar el partido, llevamos una botellita de ron, palomitas, patatas y esas chuminadas para que no faltase de nada.



Cuando llegue me puse una copa, ¡qué diferencia cuando compras tú la botella! El caso es que viendo el partido y charlando entre amigos me tome unas 3 copas, no muy cargadas, pero lo suficiente para que sin cenar y llevando son beber alcohol tanto tiempo me agarrara una de las buenas.



Nacho se dio cuenta y me dijo que si estaba bien, yo aguantaba de momento, cambie el ron por coca-cola y cuando terminó el partido y viendo que seguía un poco mareada Nacho decidió cambiar la fiesta post-partido por levarme a casa, hacerme algo de cenar y tumbarnos en el sofá a ver una peli. Cuando llegué a casa me di cuenta de algo:



Nacho, se me han caído las llaves de la mochila en el sofá de casa de Alvarito, ¡mañana tenemos que ir a por ellas!



Al rato de acabar la peli nos acostamos, el lunes nos despertamos, era fiesta, nos dio por jugar a la X-BOX. Encontramos un juego de ESDLA que se podía jugar a dobles y así pasamos el día, Nacho hizo la comida, después vimos otra peli supongo… y toda la tarde viciados a la consola hasta que pedimos la cena al chino, cenamos y yo me acosté que madrugo más que el.



La noche fue rara, muchísimo calor, me moví mucho… pero llegó el martes y de nuevo a currar.




Y diréis “pero ya se ha acabado el fin de semana ¿no?” pues sí, el finde se acabo, pero mis meteduras de pata no.




Fui a currar, todo normal. Me fui a casa, paré por el mercado y compre carne para hacer un guiso para la cena, y llegue a casa. Empiezo a buscar, a buscar, a buscar… y nada. Llamo a Nacho…




cielo… ¿a qué hora vuelves a la tienda? – a las 17:30 ¿por?- es que me he dejado las llaves en casa… eran las 16:00 así que le dije que tranquilo, que iba a comer al Rodilla y que cuando el fuese para la tienda que me llamase y me dejase las llaves. Me preocupaba la carne, pero bueno… por una horita no pasaba nada si no me quedaba en la calle con el calor que hacía.



Pero Nacho no es así, así que como había llamado –NENE PUPA- mi santo nene engulló su comida en 5 minutos y cuando apenas acababa de sentarme en el Rodilla me llamo, que venía para casa, que ni de coña me dejaba tirada en la calle 1 hora. (Gracias corazón!)



Así que llegó me dio las llaves y se fue corriendo a terminar de hacer cosas antes de volver al curro. Entre en casa y me puse a buscar las llaves pero nada. No estaban en ningún sitio. No podía ser, era imposible tenían que estar. Busque un montón de veces en un montón de sitios.




Nacho cuando llegó busco un montón de veces conmigo. Pero nada, ahí no estaban las llaves.


Hice la cena, que ya no sé donde tengo la cabeza, el pobre salió a comprar cebolla para los macarrones y yo con dos cojones hice los macarrones y se me olvidó echarle la cebolla, ahí ya empecé a preocuparme por mi estado mental. Cenamos, yo ya preocupada por las llaves, mucho.




Y cuando terminamos de cenar y me estoy fumando un piti “plin” os juro que pude oír la bombilla encenderse en mi cabeza y los engranajes de esta encajando el puzle… ¡¡Nacho!! ¡¡Que ya sé donde están las llaves!!... ¿Qué? ¿Os acordáis? Efectivamente, seguían en casa de Alvarito. Como el lunes no salimos de casa no las necesité y como cuando me di cuenta iba pedillo pues lo olvidé por completo, Pero ni imaginármelo eh!



Así que claro, Nacho no sabía si degollarme o descojonarse, menos mal que optó por lo segundo que sino…



Pero para resarcirme y no sentirme tan mal diré que no son la única que la lía parda en casa, que yo tengo mis TANIADAS pero si nos ponemos a contar Nachadas no paramos… por ejemplo, después de todo esto que os he contado me levante y se había dejado la nevera abierta toda la noche ¡otra vez!. (LO SIENTO CORAZÓN YA TE DIJE AYER QUE LO CONTARÍA JIJIJI)



Y mejor no hablemos de platos rotos………………………. XD



Pero bueno, al final con todo esto somos felices que es lo que importa y nos queremos con nuestras grandes imperfecciones y nuestras “LIADAS PARDAS”.



Espero que os hayáis reído con mi fin de semana, desde luego ha sido intenso…


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